En Erotique Pink nos tomamos un vuelo directo, sin escalas, para conocer nada más y nada menos que el país que tiene la tasa más baja de sexo en el mundo. Abróchense los cinturones y abandonen toda esperanza de tener relaciones sexuales, porque en Japón, el sexo convencional, pasó de moda.
Nuestro destino es Tokio, la capital de Japón, un país que tiene el record de abstinencia sexual. El índice de natalidad, que posiciona a los japoneses en lo más bajo del ranking mundial, demuestra que el contacto entre hombres y mujeres quedó en el pasado, pero ojo! Paralelamente, la industria de la pornografía va viento en popa!
Si estas planeando tus próximas vacaciones y tu idea es explorar la cultura sexual de otros países, te recomendamos que antes leas esta nota y elijas bien tu destino.
Japón… Sin sexo!
Los números no mienten: más de un tercio del país dejó de hacer el amor y los que todavía lo hacen, (que para nosotros serían los “afortunados”) son la minoría. Por eso, los sexólogos japoneses implementaron el término “Sexless” o los “sin sexo”, para todos aquellos que tienen un promedio de menos de un encuentro por mes*, muchos solo lo hacen una o dos veces por año (¿¡Te lo podés imaginar?!)
*Si lo vemos así creo que somos muchos los sexless!
Los japoneses no se avergüenzan en admitir que prefieren evitar el contacto sexual con otras personas, los hombres aseguran que es por el cansancio y el estrés laboral y las mujeres, por su parte, están experimentando el empoderamiento femenino en todo su esplendor y afirman no necesitar a un hombre para sentirse plenas. Pero…
¿¿Y el Sexo??
Mientras el sexo convencional entre parejas continúa su declive, la industria de la pornografía en todas sus variables, está creciendo a pasos agigantados. Es que los japoneses se rehúsan a mantener relaciones entre ellos pero de ninguna manera han renunciado al placer. ¿Cómo es esto? Se ha formado toda una industria dirigida a satisfacer sus necesidades pero de múltiples, originales, muy creativas y poco usuales maneras.
¿Estas lista para conocer cómo los japoneses llevan a la práctica sus fantasías sexuales?
Los hombres son los que más pueden aprovechar la industria pornográfica, ya que para ellos hay muchísimas más opciones:
Las famosas “video box”, que son cabinas de video donde los japoneses concurren para ver películas porno y masturbarse, los “pink salons” que son locales especializados en sexo oral,
los “Imekura” o “clubes de imagen”, que se trata de lugares en los que las chicas se disfrazan de colegialas o enfermeras y se puede dar rienda suelta a todas las fantasías,
los “no-pan kissa”, que se traduce literalmente como “cafetería sin ropa interior”, donde las camareras visten cortísimas minifaldas sin llevar nada de ropa interior…
y la lista de este tipo de locales continua y hay para todos los gustos, porque los japoneses están más que cómodos con la idea de pagar por obtener sexo, del tipo que sea, pero siempre sin preocupaciones, sin ataduras ni lazos afectivos… sin esfuerzo.